Con la muerte del preso político en huelga de hambre, el Sr. Orlando Zapata y la denuncia de los cubanos escapados de Venezuela de que eran esclavos del socialismo, una vez más se levanta por un momento, el pesado velo que oculta el atroz sufrimiento que viven los pobres cubanos bajo la pata inmunda de la revolución socialista, que hace 50 años se montó en Cuba, con los hermanos Castro y su pandilla. En verdad debe ser triste tener que vivir en un país como ese y más triste es para nosotros los venezolanos ver como poco a poco nos vamos deslizando hacia el mismo hueco en que está Cuba, gracias al traidor a la Patria Chávez y a la benevolencia con que las Fuerzas Armadas ven esto a cambio de 30 monedas.
Pero más allá de estas consideraciones que muestran por un lado el horror del socialismo y por el otro lado el peligro en que está nuestro país, los venezolanos y los latinoamericanos tenemos que ver entre indignados y boquiabiertos, la farisaica y servil actitud de la OEA al socialismo internacional, la cual simplemente está obviando el asunto y la actitud de los presidentes latinoamericanos reunidos en Cancún que aceptaron entre risas y abrazos la ridícula respuesta de Raúl Castro de que lamentaba lo ocurrido. ???.!!!
En verdad, que esta píldora ya no se puede dorar y no queda otra que decir que tanto los lideres de los países de Latinoamérica, como la OEA son mentirosos y cómplices del socialismo internacional, que ha vuelto a Cuba una Cárcel Infernal y tiene planeado hacer lo mismo con el resto de Latinoamérica.
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