11/06/2011
No hay rendición de cuentas. Donde están las casas? Como han sido invertidos los dineros? A como salió cada casa “construída”’ ? Cual es la evaluación de calidad de lo hecho, si es que se hizo algo y se evaluó? A quienes fueron entregadas las casas? Estos contratos que se mencionan alegremente son una inmensa caja negra que dan origen a toda clase de rumores, sospechas, burlas e indignación.
Deseo ilustrar la pudrición de la Misión Vivienda con el ejemplo del primer “contrato” firmado con Irán. Este “contrato” fue suscrito por Chávez con empresas iraníes en 2006 para construír 10.000 viviendas en Guárico, Portuguesa, Cojedes y Monagas, a un costo que no hemos logrado encontrar en ninguna parte. Ha sido descrito como “el mayor jamás firmado por Irán y uno de los mayores del mundo en el sector de la construcción”. Las casas debían ser construídas en 36 meses, por lo cual han debido terminarse y ser entregadas en el año 2009.
Donde están esas casas? Fueron terminadas? Fueron entregadas a los venezolanos? A quienes? Se cumplió el contrato? Es preciso hacer estas preguntas porque se sabe muy poco sobre las empresas con las cuales se firmaron los contratos. La información que poseo habla de tres empresas consultoras iraníes: (1), Ingenieros Consultores y Consultores arquitectonicos y civiles del Grupo de Ingeniería Sanati; ; (2), Compañía Tadbir Sahel Pars, y, (3), Consultor de Instalaciones Eléctricas y Mecánicas- Compañía Tavan Tak. La empresa constructora se llama Kayson, es iraní y tiene estrecha relación con Bielorrusia. Todas sus referencias son del gobierno de Ahmadinejad. Su website dice que, “por no tener trabajo suficiente en Irán”, se ha especializado en proyectos en el tercer mundo, sobretodo en Venezuela, en Bielorrusia y en la India. Está listada como “sospechosa” por Gran Bretaña y USA en actividades relacionadas con el sector militar iraní. (http://www.iranwatch.org/suspect/records/kayson-company.html ).
Cuando uno va a buscar información sobre las empresas asesoras en Internet se encuentra con lo siguiente: En el caso de la empresa Tadbir Sahel Pars Consulting Engineering, no se describen actividades, ni tiene productos. La dirección no se especifica. Tiene un Teléfono: 0214404165 y un website: http://www.tadbirsahel.com pero al abrirlo no tiene contenido. La empresa Tavan Tak Jam Co. muestra el teléfono 98-262-3262770. Tiene un Website: http://www.tavantak.com. Pero, al abrir el sitio, se observa que no guarda relación alguna con la empresa. Para el Grupo de Ingeniería Senati o Sanati no hemos logrado encontrar información en Internet.
Que credibilidad podemos asignarle a este contrato gigantesco para 10.000 viviendas si las empresas asesoras parecen fantasmas y la empresa constructora está bajo investigación en Occidente por sus nexos con Ahamdinejad?
Repito la pregunta: Donde están las casas? Quien lo sabe? Quien ha informado al país? A quienes fueron entregadas?. El silencio chavista es insultante para los venezolanos. Pero ahora resulta que en Julio 2011, (AFP), se firmó un nuevo contrato con el Irán para “construír” otras 10.000 casas, a un costo de más de mil millones de dólares. Las casas serían contruídas en Carabobo, Yaracuy y Lara. El monto del contrato significa que cada casita costaría alrededor de cien mil dólares. No sabemos con quien es el contrato. Será con los mismos asesores ectoplásmicos de antes? Y si ello es así, donde están las casas del primer contrato, las que han debido estar listas hace más de dos años? El chavismo miente como sistema y esto es inaceptable para los ciudadanos.
La orgía de contratos y convenios arriba citada no guarda relación alguna con la realidad sobre la situación de las viviendas en el país. Según estimaciones independientes en Venezuela se están construyendo, a lo sumo, 30.000-35.000 viviendas por año pero el régimen habla con audacia y desparpajo de estar construyendo 150.000 viviendas este año y de construír 300.000 viviendas al año en los próximos años. Nadie sabe cuanto se está gastando o que resultados reales se están obteniendo pero lo que si es cierto es que hay un proceso de endeudamento feroz con China o a través de bonos emitidos por PDVSA, los cuales ofrecen tasas altísimas de rendimiento, un 11,95 por ciento, indicativas del grado de desespero del régimen por obtener nuevos fondos.
Esto configura un despelote con mayúscula cuyo culpable principal, no vacilo en decirlo, es Hugo Chávez Frías, hoy ausente del país por enfermedad, un hombre enfermo no de ahora sino desde siempre, a quien le exigimos que presente cuentas claras al país sobre este cuento chino, uruguayo, bielorruso, turco ,iraní y ecuatoriano o entregue el mando, para bien del país. Venezuela se desangra debido a la ineptitud y corrupción del régimen. Sus integrantes siguen hablando pendejadas sobre un proyecto socialista mientras Chávez anda en un Bentley de $200.000 y usa un reloj de $100.000.