6/3/12
Un mil doscientos quince de ocho mil nuevos ¨médicos integrales comunitarios¨ (MIC) han salido de las cintas sinfín de producción en masa de las escuelas de medicina socialista, nadie sabe dónde ni cómo fueron formados y cuáles son sus fortalezas y sus muchas debilidades. Chávez les impuso su mano y los graduó en cambote. Sólo se sabe que un buen día, luego de 6 años sumergidos en un aula comulgando con una computadora y ante la mirada virola de sus instructores cubanos, en ausencia de pacientes con los cuales hablar y examinar, han sido enviados a los hospitales públicos a tratar, inútilmente, de enderezar sus troncos torcidos. Timados por una oferta engañosa como han sido, se han sentido amedrentados, muy inseguros y han vivido muy de cerca la crasa ignorancia que poseen al no más iniciar su ejercicio. No entienden el lenguaje médico, no saben cómo emplear provechosamente un estetoscopio o un martillo de reflejos. Peor aún, no entienden el lenguaje críptico de la enfermedad como narrada por los pacientes.
Para Chávez todo es sencillo; eso parece dictarle su cerebro elemental. Ordena 20 mil médicos, y a la cubana, sin preguntarse de dónde saldrán sus instructores, y cómo obtendrán su formación, de dónde sacarán laboratorios, secuestra e incomunica a los estudiantes en cotos cerrados. Lo que importa es acabar con una medicina nacional de altos quilates; eso sí, comprando conciencias y negando recursos y ahogando a las universidades tradicionales.
Como conducidos por un invidente, semejan en la realidad el cuadro la Caída o Parábola de los Ciegos de Pieter Brueghel El Viejo (1568), donde una ristra de ciegos que caminan unidos por sus bastones, caen todos al tropezar y caer el ciego que les guía. Seducidos mediante oferta insincera, engañosa y vil, creen haber aprendido la más humana de las ciencias –la medicina-, mediante interacción con un ente inanimado, que para colmo, ha sido infectado con programas elaborados por otros con ideologías fracasadas y en ausencia, para comenzar, inicialmente del cuerpo inerte del cadáver y posteriormente de la interacción con el ser vivo que sufre. Ahora no saben qué hacer… ¨El viceministro de Redes y Servicios Sociales del Ministerio para la Salud, José España, informó recientemente que los médicos completarán su formación en hospitales, durante dos años de internado rotatorio, en especialidades como pediatría, medicina interna, cirugía y obstetricia¨. ¿Cómo es la cosa, son o no son ¨médicos integrales¨…? La nueva Venezuela que ha nacido deberá ocuparse de estos jóvenes engañados, guiándolos hacia lo mejor de sus destinos…