28/7/14
Es necesario evidenciarles a los venezolanos, y a nuestros amigos en la región, el desencanto que producen las declaraciones de los factores que se dicen opositores en Venezuela. Hay 5 “propuestas” de acción, dentro de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD): 1) esperar hasta las Elecciones Presidenciales de 2019; 2) esperar el Referéndum Revocatorio; 3) hacer un “Congreso Nacional de Ciudadanos” que conlleve a una Constituyente; 4) renovar los Poderes Públicos para adelantar elecciones; 5) esperar hasta las Elecciones Parlamentarias de 2015.
En la Resistencia hemos mantenido una postura clara: conquistar nuestra Libertad pasa por cambiar -completamente- el sistema político, haciendo que sean depuestos todos los representantes de los Poderes Públicos Ver JPEP Manifiesto de Mérida y Comunicado de Maracaibo. La MUD catalogó esta postura como “radical”, “fascista” y “golpista” (mismas categorías discursivas que usa el régimen comunista); sin embargo, ahora adoptan algunos de esos planteamientos políticos, generados en el fragor del debate interno de nuestras filas. Nosotros no olvidamos el plagio.
Ellos, queriendo aprovecharse del brillo espiritual juvenil, han querido confundir a la comunidad nacional e internacional declarando que, para el logro de aquellos planteamientos adoptados, la MUD tendría que renovarse/reestructurarse. Dicen que se tiene que incluir a los estudiantes, a los gremios, a los sindicatos y a los demás factores sociales de poder. Este es un monumental contrasentido; pero, ¿por qué? La MUD existe, como tal, ¡desde el año 2009! (por cierto, no hubiese sido posible su existencia, sin la irrupción de aquel Movimiento Estudiantil de 2007) – como continuación de la extinta Coordinadora Democrática. Si en más de 5 años NO ha habido esa “inclusión” -como ellos le llaman a un proceso que sería nefasto para su supervivencia como mascotas del régimen-, deben estar bien convencidos de que la gente es lo suficientemente estúpida como para pensar que la MUD tiene intenciones patrióticas. Después de demostrar, con su acción política, que son parte del régimen, y que colaboran con el mismo, es natural que no quede ni un factor independiente, en la sociedad venezolana, incapaz de ver a través del cinismo de la MUD.
Nosotros, los jóvenes, NO queremos ser parte de la MUD; muchos ya lo fuimos. Allí descubrimos que su gerontocracia nos quiere convertir en ese tipo de hombre-parásito que jamás se forja un destino [hablé de ésto en mi artículo del pasado 13 de julio]. Hoy sé perfectamente que hice todo lo posible para poder transformar, “desde adentro”, a los mal-llamados partidos (tal y como se nos inducía tramposamente, en 2007 y 2008, con aquella ficción de que dicho objetivo podía lograrse de hecho); pero resulta que yo también descubrí el engaño, todos los partidos de la MUD son iguales al PSUV.
La MUD no es otra cosa que una cara de la moneda de este sistema político -que es profundamente decadente-; el PSUV es la otra cara. Ambos representan a una clase política anquilosada en un triste y maloliente pasado – nótese que jamás hablan del futuro (¡cómo podrían!). La MUD contiene el mismo trazado ideológico que el PSUV (doctrinas de origen marxista), y alega que el problema es la existencia de un inocente “déficit democrático”; por eso, llama a votar una y otra vez, obviando el fraude (o quizá en vista de que se hace fraude). Eso, estimado lector, no es ingenuidad, eso es táctica. No es casualidad que la armonía y la conexión político-emocional entre ellos y la población que dicen “representar”, sea hoy virtualmente inexistente.
Proponer, entonces, que se “reestructure” la MUD, que se “renueve”, demuestra que ellos NO quieren salir de este sistema político atroz; todo lo contrario, ellos quieren perpetuarlo. La importancia de esto es trascendental, y radica en lo siguiente: es un buen indicativo de quiénes son los que NO van a gobernar la Venezuela Futura.
Para desconocer al régimen comunista, hay que desconocer primero a su contraparte: la traidora y farsante MUD. Por eso, no se puede olvidar:
1.- Quiénes apagaron la protesta, con el “diálogo”.
2.- Quiénes estuvieron en contra de las sanciones individuales a funcionarios de la tiranía, por parte de los EEUU.
3.- Quiénes son los que negocian puestos en el TSJ y el CNE (incluso hasta -desde ya- en la AN).
4.- A quienes dicen que esto se resuelve en elecciones.
5.- A quienes dicen que es “golpismo” una intervención militar institucionalista para devolver el hilo constitucional -como lo establece la Constitución.
6.- A quienes proponen un gobierno de coalición con el criminal PSUV bajo el argumento de la “reconciliación –impunidad- nacional”.
Libertad o nada