13/01/19 (Parte I)
"Venezuela vive cualquier cantidad de realidades y sigue bastante lejos de la única realidad importante."
Genny De Bernardo: Hay mucho mucho para hablar; en Wikipedia hay dos presidentes para Venezuela. En este momento leer Twitter es un poco descolocarse a veces de la realidad. ¿Cómo se vive hoy 13 de enero en Venezuela con todo lo que ha pasado? ¿Qué pasó después del 10?
Noel Leal: Fíjate, Wikipedia tiene dos presidentes para Venezuela y a mi entender Venezuela no tiene Presidente. Venezuela no tiene Presidente desde hace muchísimo tiempo, para mí, en mi visión por supuesto, Maduro no es ilegítimo de ahorita, la elección aquélla donde Capriles le cedió su triunfo, evidencia que Maduro no era Presidente en aquella oportunidad, igual que Chávez tampoco en las anteriores, porque la justicia, la ley, la lógica, lo electoral, todas esas cosas, estaban en contra de las realidades que hemos tenido que vivir durante todos estos años, realidades.
Llegamos acá y encontramos que el 10 de enero, marca lo que marca ésta Constitución; ésta Constitución marca que el 10 de enero se vence aquel período de Nicolás Maduro, y tanto la Asamblea Nacional, como la gran mayoría de los países, desconocen el último fraude que Maduro ejecutó como candidato presidencial. Ese último fraude ya es desconocido por el país, apenas el último, los demás todos son legales, pero el último fraude es desconocido. El mundo toma eso en consideración y le brinda su apoyo a este aparato que es la Asamblea Nacional. La Asamblea Nacional como hablamos la semana pasada, desde mi óptica, y la óptica de muchos, no tiene legitimidad alguna dado que nace de esa misma mentira electoral, y nace de la parte más dura de la mentira electoral, donde obliga más a la gente a validar esa mentira, porque es muy importante tener en cuenta estos números; esa Asamblea Nacional nace de un proceso electoral donde se dice que 14 millones de personas votaron; 7 millones y tanto por el chavizmo y 7 millones y tanto más por la oposición, entonces, ese porcentaje opositor, le dio en aquel tiempo dos tercios de aquella Asamblea, y por supuesto una mayoría evidente, y vino el TSJ formal, el del Gobierno y le quitó Diputados y les puso otros....Bueno, el asunto es que, viviendo ésta realidad paralela que no es nueva, Venezuela tiene dos Asambleas, la Asamblea Nacional y la Asamblea Constituyente, una espuria y la otra, dentro de mi punto de vista, también escasa de legitimidad, la otra simplemente es un acto criminal; y tiene dos TSJ y tiene ahora dos Presidentes.
Venezuela vive cualquier cantidad de realidades y sigue bastante lejos de la única realidad importante.
Quizá para entender lo que pasa hoy en Venezuela, hay que acercarse a las palabras de una persona que hemos nombrado en anteriores oportunidades, el ex embajador William Brownfield.
William Brownfield declara hoy, que él no tiene ninguna duda del colapso del proceso chavizta en Venezuela, para él, es evidente el colapso, y sólo le faltan las páginas del libro, que es lo que dice cuánto tiempo más le falta. ¿Por qué?, porque basa su pensamiento en lo que lo basa cualquier persona cuando entra un proceso revolucionario de carácter socialista a la toma de un poder de un país; te vas a terminar, y no va a ser por un método democrático, natural, formal; son cualquier cantidad de cosas las que hacen que tú desgaste, por el efecto del daño inmenso que le estás haciendo a esa sociedad, a ese país, a su economía, tenga un final. Ese final, naturalmente lleva a un proceso o de desgaste de 70 años de espera, o a un proceso de fuerza, y hay un proceso que siempre se intenta una y otra vez, que son dentro del marco de los procesos constitucionales y los espacios de ese tipo.
"[...] nada en este país, tiene el más mínimo disfraz de democracia"
Hoy Venezuela vive otra nueva etapa de procesos constitucionales para poner fin a la desgracia chavizta en el país, pero tiene un valor agregado importantísimo, una comunidad internacional en su mayoría, que aúpa, que este proceso, de desconocimiento del chavizmo, sea llevado a cabo y capitaneado por la estructura de la Asamblea Nacional; en este caso, por la presidencia de la Asamblea Nacional, por el Diputado Juan Guaidó.
El Diputado Juan Guaidó, llega a la presidencia de la Asamblea Nacional, a través de la estructura de acuerdos, que hizo posible aquel triunfo en la elección del 2015; le tocaba la presidencia de la Asamblea Nacional al partido de Voluntad Popular, y el representante de Voluntad Popular electo para asumir esa posición, fue el Diputado Guaidó, y le toca ahora asumir la posición de ser Presidente de la Asamblea Nacional en medio de esta coyuntura; una coyuntura qué va más que todo obligada, por esa comunidad internacional que le está, no apoyando, porque va más allá, quizá para entender que es ese más allá, está el mismo hecho, en que, ni el Diputado Guaidó, ni la Asamblea Nacional han hecho el quórum necesario, ni el mínimo de formalidad para decir, si, yo asumo la Presidencia de Venezuela, la encargaduría de la Presidencia de Venezuela, o cada una de esas partes; eso no se ha hecho, no se ha hecho ni un mínimo al respecto, tanto así que, la misma Asamblea Nacional, su órgano de comunicación, sigue identificando al Diputado Guaidó como Presidente de la Asamblea Nacional, y no, como Presidente encargado de la República.
Entonces, esos pasos no se han dado, por lo cual, a mi entender, Venezuela sigue sin Presidente.
El Diputado se encuentra hoy, en esa posición de tener que asumir, de acuerdo a la obligación constitucional y a la presión internacional; presión internacional porque, si vemos, el Diputado todavía no ha asumido de manera formal esa posición de Presidente del país, pero, hasta el Secretario General de la OEA, se refiere a él como "el Presidente Guaidó", y así, Wikipedia.
El vacío que Venezuela está viviendo es real, nosotros tenemos una ausencia de Presidente, tenemos a una persona que debería de asumir una posición, la cual, yo entiendo plenamente por cuáles razones no se asume, y, tenemos la imposición formal -ahora sí, sin ningún tipo de vestimenta, ya no cabe más engaño, ya no hay más mentiras electorales- de la estructura totalitaria formal, el avance formal del socialismo.
Maduro ahora no le queda más, ni a él, ni a su camarilla, ni a la estructura de lo que es el TSJ, ni la estructura de lo que es la Fiscalía, nada en este país, tiene el más mínimo disfraz de democracia. Ya no cuentan con la oposición para seguirlo vistiendo de democracia de la manera tradicional, ahora hay que buscar alguna otra forma para poderle dar algún tipo de ropaje seudo democrático a la estructura de Gobierno de Maduro. Se la pusieron difícil, porque también no depende de esa Asamblea Nacional, ya no depende de esa oposición que ha venido vistiendo de democracia al Gobierno durante todos estos años. Ya la presión internacional, obliga a que esa oposición tome el control de esta situación. Por eso es que vamos ahora a intentar entender, cuál es el escenario que nos ofrece la comunidad internacional, frente a la realidad de nuestra situación.
"[...] el régimen se preparó para esto, ahora viene, lo que es la verdadera tiranía impuesta."
La Constitución de 1999, Constitución impuesta por el chavizmo, Constitución que fue aprobada con menos del 28% y medio de la población para el año de 1999 en medio de la tragedia del Estado Vargas, una Constitución hecha a imagen y semejanza y las necesidad de Hugo Chávez en aquel entonces, marca entre sus espacios que, el período presidencial de 6 años en la última modificación, vence el 10 de enero; frente a esa realidad, si el Presidente no se puede juramentar en la Asamblea Nacional puede hacerlo a través del TSJ, dice la Constitución. Por supuesto que, la Constitución interpreta al chavizmo de alguna manera, por eso es que siempre han podido hacer las cosas "legalmente" y si no, simplemente se la saltan a la torera. Esta vez, viene el verdadero salto.
La oposición pone a su representante Guaidó como Presidente, porque tiene la obligación de hacerlo de acuerdo a esa Constitución; ¿puede Guaidó ejercer la Presidencia? No, porque Maduro tiene muy bien estructurado su control de Gobierno; los cómplices, la estructura militar vendida hacia el Gobierno, la estructura del narcotráfico que ha financiado cada una de estas opciones, la estructura judicial que hace vida a través del TSJ, y el resto del aparato que ha servido de control férreo frente al país, existe, lo único que se cayó es, lo que lo viste de democracia, eso hoy ya no lo pueden hacer por más que estén ofreciendo elecciones.
Vamos a éste panorama, cómo puede Guaidó ejercer la Presidencia. La realidad es, que en algún momento se verá obligado a asumir, de manera formal esa posición. La Asamblea se tiene que reunir, generar el quórum, manifestar su disposición a aceptar la encargaduría de la Presidencia, y por supuesto, el Gobierno por lógica, intentará detenerlo y allí empezará un proceso donde, estos apoyos internacionales tienen que hacerse cada vez más fuertes, reales, para poder sostener, no solo la vida de Guaidó, sino, la transición. Entonces, dentro de este escenario, el joven Presidente de la Asamblea Nacional, decide que van a comenzar una nueva ruta de transición, la cual incluye una serie de protestas, cosa que nos trae al venezolano promedio un amargo sabor a déjà vu. La primera protesta de ésta secuencia se iniciará el 23 de enero, dentro de 10 días más.
Dentro de 10 días se ha convocado a la primera manifestación general dentro de este proceso, y de allí se supone entonces que irá a asumir la presidencia y empezarían a correr los 30 días para una elección, eso es lo que yo denomino la esperanza bufa; ¿por qué? porque no tiene nada que ver con respecto a la realidad.
¿Cómo se pudiese lograr eso? con mucho apoyo internacional, con grandes presiones, desmontando de mil y una manera la posibilidad de acción de parte del chavizmo, recogiendo todo el dinero robado, generando una serie de situaciones que hagan imposible el accionar del Gobierno. No olvidemos que lo hemos hablado en otras oportunidades, el Gobierno se preparó para esto. ¿Cómo lo va a soportar? Ya veremos.
¿Dónde está otra herramienta adicional con la que cuenta esta comunidad internacional para ir presionando a Maduro?, cualquier cantidad de juicios a nivel internacional donde Maduro sale directamente salpicado, lo cual avanza y le brinda soporte a la idea de esta eventual transición.
Cuando usted toma todos esos aspectos, y lo hace en un laboratorio estéril, con cápsulas de petri, con cada una de estas cosas, va a salirle muy bien. La realidad es que este laboratorio no es estéril, la materia con la que se está jugando, es bastante inestable, y eso nos acerca al resto de la realidades; el régimen se preparó para esto, ahora viene, lo que es la verdadera tiranía impuesta.
La única manera, la única oferta, el único planteamiento fuerte que tiene la Asamblea Nacional, en éste caso Guaidó para poder ir tomando real control, es, ofrecer, dentro del paquete de su llamada transición, impunidad. Impunidad a través del esquema de Justicia transicional, como la que Santos le brindó a las FARC, impunidad como la que ofrecía la criminal Luisa Ortega Díaz a la estructura que acompaña al chavizmo. Por eso en su propuesta, la primera parte de la propuesta es, no puede haber transición sin chavizmo.
Esa es la realidad de lo que vive Venezuela hoy.
Venezuela hoy, a mi entender, no tiene Presidente, la oferta de transición se basa en la impunidad, la cual es viable dentro de un laboratorio estéril. ¿Qué pasa si eso falla? Esa es la pregunta.
"[...] es una trampa jaula bien diseñada, [...]"
Genny De Bernardo: Iris Varela le dijo a Guaidó que ya le acomodó la celda, con el respectivo uniforme y espera que nombre rápido el Gabinete para saber quiénes lo van a acompañar. ¿Cómo puede una "señora", titular de la cartera de servicios penitenciarios, hacer esas declaraciones? En Venezuela todo es posible, sí, pero el mundo lo escucha, el mundo lee Twitter, el mundo entiende que, con la movilización está del 23 de enero, si Guaidó va, y no hay un arreglo de impunidad, va a terminar en una celda.
Noel Leal: Y más allá del acuerdo de impunidad; Guaidó, o la responsabilidad que ha tenido que asumir Guaidó, tienen que contar con ese respaldo fuerte, férreo de la comunidad internacional, que vaya más allá de documentos; es decir, vamos a ver situaciones que van en contra de la lógica de los comportamientos diplomáticos, los cuales podrán tener futuro siempre y cuando se entienda que, no se reconoce al Gobierno de Maduro, si no, no hay ningún tipo de espacio. Mientras exista algún tipo de reconocimiento al Gobierno de Maduro, cualquiera de esas acciones no tiene algún tipo de lógica, usted no puede respaldar a este Presidente Guaidó, mientras reconozca al Gobierno de Maduro, no existe.
Posiciones como las de Paraguay, donde Paraguay hasta expulsa al personal de la delegación diplomática de Venezuela en Paraguay, son las que puede acercar más a la realidad de que, no te vamos a reconocer, no vale que tú pidas diálogo, no vale que tú digas que, hay que venir a un encuentro latinoamericano para atender la posición de Venezuela; nada de eso vale, tú estás aislado y te vamos a sacar.
Si eso pasa más allá de lo que es la visión del Grupo de Lima, si cada uno de los países actúan en este tipo de situaciones, también corre el riesgo Guaidó, de que ninguna de esas acciones, ninguno de esos espacios diplomáticos, puedan tener algún tipo de acción en su defensa.
Entonces, es una trampa jaula bien diseñada, por eso es que, dentro de un laboratorio estéril, este tipo de planificaciones salen bien, pero fuera de el, no lo creo.
"[...] lo que se está mostrando es una esperanza bufa, y cuando la esperanza bufa se enfrenta al sentido común, el sentido común siempre gana por nocaut."
Genny De Bernardo: Paraguay fue firme, pero, fueron muchos los países que, no han reconocido, fueron pocos en realidad los que asistieron a la investidura de Maduro. Obviamente Cuba, Bolivia, Nicaragua, El Salvador, un representante de México, el Presidente de Osetia del Sur, el Secretario General de la OPEP, una delegación turca, una delegación de Uruguay, de Rusia y de Belice.
Noel Leal: Palestina. Mira, eso es lo de siempre. Por supuesto que Maduro no tiene ningún tipo de reconocimiento, y menos gente hubiese venido a la investidura anterior, si no se le hubiese vestido de democracia de aquella manera, si se hubiesen expresado las realidades sobre los fraudes electorales vividos. Nosotros estamos viviendo, sufriendo estos 20 años de chavizmo, por la colaboración directa de eso que se llama "oposición".
Ahora, lo que tú decías y hacías referencia a eso de cómo lo está tomando el venezolano. El venezolano se vuelve a sumir en la esperanza, en una esperanza que duele para los que hemos estado advirtiendo está situación durante tantos años, porque, se hace realmente complicado. Ayer yo tuve que colocar un tweet, porque yo veía a mucha gente que despertó, ofendida, realmente molesta viendo como otros, que creían que habían despertado, inmediatamente soltaron toda lógica, toda coherencia, y fueron y abrazaron esta idea de que puede existir algún tipo de salida democrática a esta realidad. Y entonces vuelven a abrazar a la Asamblea Nacional, y empiezan a encontrar grandísimas virtudes en los miembros de la Asamblea Nacional que han hecho posible esta realidad. Entonces, yo les explicaba en un solo tweet a la gente, no te molestes tanto, porque esa es la realidad que yo he tenido que vivir todos estos años, hasta hace nada, tú pensabas en Capriles, y yo te tenía que mirar desde lejos, pensabas en Rosales, Leopoldo, María Corina, pensabas en cualquiera de esas realidades que nos pusieron aquí, las veías como alternativa positiva. La realidad es que nosotros hemos llegado aquí, gracias a la vestimenta de democracia de ésta realidad. Hoy, la propuesta de vestimenta democrática, técnicamente sigue, pero, en la democracia, cuando estás obligado existe la alternabilidad, y lo que la comunidad internacional está obligando, es que la Asamblea Nacional haga valer esa alternabilidad.
Si la Asamblea Nacional durante todos estos años, eso que se llama oposición legítima en este país, se ha abrigado en la Constitución, está en la obligación de hacer cumplir y valer esa Constitución; entonces, ya no tienen otro refugio para no hacer lo que la Constitución les obliga.
¿Cómo lograrlo? Ya lo planteamos; ¿funciona? en mi opinión, no; y eso es lo que hace que el país continúe en riesgo cada vez más profundo, porque a la tiranía no le queda más que quitarse cualquier ropaje y empezar a hacer lo que hace una tiranía formal, ir corriendo las páginas del libro del que nos hablaba Brownfield.
"Yo no veo, que sea posible que nada de esa Asamblea Nacional traiga el futuro mínimo necesario para Venezuela, pero, el país está envuelto en esa esperanza, de nuevo, y creo que el sentido común nos va a dar una lección muy cruel al respecto."
La situación en Venezuela es increíblemente delicada, y hay que entender cómo lo entienden, la principal muestra de que, si se está haciendo un cambio con tendencia positiva, o si se está haciendo un cambio que no lleva a ninguna parte.
La principal muestra de eso, es el indicador económico.
El indicador económico, muestra la realidad de que Venezuela está a punto de romper un nuevo récord con respecto al valor del dólar, la vida en Venezuela se va a hacer....ya es imposible, lo que vamos a vivir ahora es realmente una crisis económica increíblemente salvaje; esa realidad no tiene ningún tipo de reflejo positivo.
Cuando el 11 de abril del año 2002, que hubo la salida de Chávez, el bolívar venezolano en aquel entonces recuperó terreno frente al dólar, nuestra deuda subió de calidad, se hacía apreciable, apetecible, y cada una de esas cosas muestran cuando un cambio tiene visos positivos.
Desde el inicio del Gobierno de Jair Bolsonaro, vemos como el Real brasileño se está convirtiendo en la moneda más apreciada en estos momentos; la única moneda con real crecimiento en estos momentos, ganándole espacio, recobrando espacio en el dólar; y todo es ese asunto de la transmisión de confianza de que se está haciendo lo correcto y enviando ese mensaje. Ese termómetro, eso que sabe leer muy bien, es el dinero, es la economía, es la estabilidad, es la seguridad, esa seguridad donde se refugia el dinero. En Venezuela esa seguridad no se ve; no se ve porque no se está haciendo lo correcto, porque lo que se está mostrando es una esperanza bufa, y cuando la esperanza bufa se enfrenta al sentido común, el sentido común siempre gana por nocaut.
Venezuela va para un período aún mucho más difícil. Si el laboratorio éste, de ésta idea de desplazar con presión internacional el régimen de Maduro, no logra cohesionarse, no logra hacer el efecto necesario, por supuesto, la representación de el país, va a recaer aún más, en la estructura que está tomando la Presidencia, caería más en Guaidó; entonces, esa estructura de Gobierno, tendría que salir del país y empezar un proceso de Gobierno en el exilio. Mucha gente ha llamado para que exista un Gobierno en el exilio, y pueda ir ese Gobierno haciendo el trabajo necesario. A mí me preocupa mucho que ese Gobierno en el exilio nazca de la Asamblea Nacional. Simplemente es algo que, para mí, no tiene lógica, ni respaldo, y esta es una posición muy muy personal. Los miembros de la Asamblea Nacional, no por eso estoy juzgando personalmente a Guaidó, ustedes llegaron, bajo un esquema electoral donde no existe democracia, y no es algo de ahorita. Venezuela tiene una total ausencia de democracia, de Estado de Derecho, de equilibrio de poderes, desde 1999. Todas las elecciones desde el año 2004 en adelante, quedó certificado académica y científicamente que son un fraude. Entonces, cada uno de estos años fueron vistiendo de democracia esa realidad, hayan o no participado de manera directa, fueron parte del aparato que hizo ésta realidad y que vistió de democracia nuestra desgracia. Yo no veo, que sea posible que nada de esa Asamblea Nacional traiga el futuro mínimo necesario para Venezuela, pero, el país está envuelto en esa esperanza, de nuevo, y creo que el sentido común nos va a dar una lección muy cruel al respecto.